Dirigente Nacional de la CTC es candidato a Consejero Constitucional por la región de Antofagasta.

Dirigente sindical de la CUT y la CTC, ex Concejal de la Municipalidad de Calama por dos períodos consecutivos y hoy candidato a Consejero Constitucional por el pacto Unidad Para Chile en la región de Antofagasta. Conversamos con José Mardones Gallardo, quien además es militante del Partido Comunista de Chile, y nos contó sobre este nuevo desafío, un proceso que él mismo describe como “muy trascendente para Chile y su futuro”.


¿De que manera surge esta candidatura, y como describiría el momento político en que se da este segundo proceso para escribir una nueva constitución para Chile?

Surge del debate, del análisis de un colectivo de trabajadoras y trabajadores, de dirigentes sindicales, en donde concluimos que nuestros temas, lo crucial para nosotros, como el trabajo decente, no estaba presente. Incluso el mismo compañero David Acuña, presidente nacional de la CUT, lo señaló al advertir que en los 12 ejes constituyentes no se habla del tema trabajo. Entonces, a pesar de sentirnos excluidos del nuevo proceso constituyente, auto excluirnos sería empeorar el panorama. Por otro lado, el Partido Comunista, partido en el que milito, tuvo a bien acoger mi candidatura y aquí estamos. Así que vamos a estar como pulga en la oreja con los problemas que afectan al conjunto de los y las trabajadoras del país.

Sobre el momento político, creo que es complejo. Existe desconfianza y también desconocimiento del proceso, por lo que es una enorme tarea convencer a la inmensa mayoría de chilenas y chilenos, que somos los trabajadores.  Somos cuatro millones, según el Ministerio del Trabajo, y otros cuatro [millones] en trabajos informales. Eso el movimiento sindical, y no lo podemos hacer solos.

¿Cuales son los asuntos que más destacaría en la discusión constitucional?

El rayado principal de la cancha es que Chile sea un Estado Social y Democrático de Derechos. Es decir terminar con el Estado Subsidiario de la actual constitución, que es fuente de desigualdades económicas y sociales. Ahora, para nosotros como trabajadores, es fundamental consagrar el Trabajo Decente como derecho constitucional y lo demás viene por añadidura. Me explico: frente a una huelga general, como está pasando en Francia, España o Inglaterra, ningún gobierno o parlamento se va a negar a entregar pensiones dignas, acceso a una salud y educación de calidad, derechos que además son perfectamente posibles. Y es en ese sentido que también estamos por incorporar la Renacionalización de los Recursos Naturales como el cobre, el agua y el litio. Entonces, por supuesto que haremos nuestras las demandas del pueblo trabajador, y si no quedan escritas las soluciones, se deben instalar lo mecanismos constitucionales para habilitar leyes en favor de las grandes mayorías, por ejemplo respecto de la negociación ramal o multinivel y el derecho a huelga efectiva.

Usted es dirigente sindical, de la CUT y de la CTC, pero también ha sido concejal de la ciudad de Calama por dos períodos consecutivos. En ese sentido, ¿cómo se plantea usted esta candidatura, y cuales son sus énfasis?

Como trabajadoras y trabajadores de la Región de Antofagasta nos agobia el centralismo, que todo se resuelva en Santiago.  No vamos a tener democracia sin una verdadera regionalización y descentralización. No es sostenible, por ejemplo, que los recursos, el equipamiento y personal para prevenir y combatir el delito, la delincuencia organizada o el narcotráfico, que son flagelos que afectan directamente al pueblo trabajador y sus familias, se intente resolver dese Santiago.  Y esto ocurre en todos los ámbitos, poner en una población de Antofagasta, de Tocopilla o Calama, un nuevo retén, una nuevo Consultorio o más ambulancias, depende de Santiago.  Somos la Región que más aportamos al Producto Interno Bruto, y es la que proporcionalmente menos recibimos.

El estallido, o revuelta social de octubre de 2019, puso en evidencia las profundas desigualdades e injusticias que aún aquejan a la población en general. Una de sus dimensiones son las relaciones laborales, el mundo del trabajo: ¿cuales son los asuntos más sentidos que como trabajadoras y trabajadores, junto a sus organizaciones sindicales, esperan sean discutidos en este nuevo proceso?

Cuando nos referimos al mundo del trabajo, hay que entenderlo de manera integral: el trabajador o trabajadora está mal pagada, en general no tiene acceso a derechos fundamentales como la salud, vivienda y educación dignas o de calidad. Ahora yo no sé de dónde salió la teoría de que los trabajadores y trabajadoras venimos de Marte, porque esa misma persona, en su lugar de residencia, es el poblador o pobladora y es víctima de asaltos, de violencia contra las mujeres, es objeto de discriminaciones y sufre el constante aumento de precios de los productos de primera necesidad. Esa misma persona, que, insisto, es trabajador o trabajadora, sufre con las colusiones que se generaron de empresas que ya todos saben, colusiones que como castigo tuvieron clases de ética, y que lamentablemente, a esos ladrones de cuello y corbata, la actual constitución protegió. Por otro lado, es también el trabajador y la trabajadora quien lidia con los atentados al medio ambiente, con la falta de agua potable, con la falta de vivienda. Es la trabajadora la que lidia constantemente con la desigualdad de sueldo entre hombres y mujeres, en fin, el mundo del trabajo es tan amplio como los problemas que aquejan a toda la población.

Un dato no menor sobre la situación laboral es que los países avanzados tienen negociaciones ramales, y que de esa forma lograron tener indicadores de mejor distribución de la riqueza. sin ir más lejos, en el proceso anterior [de discusión constitucional] los cinco o seis artículos referidos a los derechos colectivos de las y los trabajadores, como lo son la sindicalización, la negociación colectiva y el real derecho a huelga, fueron aprobados por casi la unanimidad de los convencionales constituyentes, tanto de izquierda como de centro y de derecha. Esperamos, entonces, que en este nuevo proceso, el consenso frente a este tema sea igual o superior.

Sobre su candidatura, ¿que busca con ella y cual es el sello a imprimir en esta campaña?

Quienes nos conocen saben que hablamos con la verdad, con sinceridad y actuamos en consecuencia, aunque a muchos les moleste. No hay dirigentes sindicales en el Comité de Expertos, y sobran dedos de una mano para contar cuantos dirigentes sindicales van de candidatos a Consejeros Constitucionales. Pues bien, la cosa podría ser peor. El voto será obligatorio y no cabe duda de que la mayoría de las y los trabajadores van a ir por obligación a votar el 07 de mayo, para evitar pagar la multa y, con toda la rabia e indignación que hay, incluso habrá quienes van votar nulo o en blanco. Señalamos entonces que restarse de este proceso solo va a llevar agua al molino de quienes están en contra de los cambios, en contra de las transformaciones y de los derechos sociales. Por eso nuestro llamado es a estar atentos, a informarse sobre las distintas propuestas, en especial de las propuestas de Unidad para Chile. Este proceso, que es muy trascendente para chile y su futuro, tiene que ser lo más democrático posible, y eso se va a dar en la medida de que haya más participación ciudadana. Democratizar aún más nuestro país, sin lugar a dudas, pasa porque en la próxima y nueva constitución estén expresados los anhelos de millones de mujeres, hombres, jóvenes, niños, niñas, adolescentes y adultos mayores, pero por sobre todo de trabajadoras, trabajadores y sus familias. A eso aspiramos, y en eso vamos a poner todo nuestro empeño.