CTC participó en presentación de libro “Identidad y trabajo: el proceso de construcción identitaria en los trabajadores subcontratados de la gran minería del cobre en Chile”.

El día de ayer, jueves 31 de agosto, la Presidenta de la Confederación de Trabajadores del Cobre (CTC), Ana Lamas Aguirre, participó del panel que presentó el libro “Identidad y trabajo: el proceso de construcción identitaria en los trabajadores subcontratados de la gran minería del cobre en Chile”, del Sociólogo y Doctor en Ciencias Sociales, Mauricio Muñoz.

El evento, realizado en el Auditorio de la Facultad de Psicología de la Universidad Diego Portales, contó con la asistencia de alumnas y alumnos de dicha casa de estudios, de profesores, familia y amigos del autor. A la ocasión, cabe agregar, también asistieron los dirigentes nacionales de la CTC Jedry Velis, Patricio Roco y Claudio Escobar; y tuvo como panelistas de presentación, junto a la Presidenta de la CTC, a Antonio Aravena, investigador adjunto del Programa de Estudios Psicosociales del Trabajo (PEPET); y a Francisco Zapata, profesor e investigador del Centro de Estudios Sociológicos (CES) de El Colegio de México, quienes se refirieron al trabajo realizado por el autor, quien, en una labor investigativa de larga data, logra dar con importantes elementos que han ido determinando la identidad social de las y los trabajadores subcontratados de la gran minería del cobre.

Precariedad laboral y discriminación.

Mauricio Muñoz, autor del libro, señaló que (en Chile) entre las formas de contratación de personas la subcontratación está en el primer lugar. Lo mismo, como es sabido, ocurre en la gran minería del cobre, donde alrededor del 75% de la masa trabajadora está bajo el régimen de subcontrato. Lo anterior, explica el autor, y por la naturaleza de este tipo de empleo, determina realidades que finalmente van construyendo identidad en la masa de trabajadoras y trabajadores subcontratados. es así como la alta movilidad laboral, en el sentido de que se trata de una mano de obra que circula mucho, tanto geográficamente como entre contratos y/ó faenas, y que se debe principalmente a la relativamente corta duración de sus contratos, ponen a la y el trabajador subcontratado en una condición de permanente incertidumbre e inestabilidad laboral. Por otro lado, y también debido al sistema de contratación en el que se encuentran, existen marcadas diferencias en comparación a sus pares de labor que se desempeñan bajo un régimen de contratación directa con la empresa mandante. Diferencias, apuntó el autor, que se evidencian, por ejemplo, en lo salarial y en las condiciones de trabajo. Es de tal manera que entre otros, estos dos elementos (precariedad laboral y discriminación), entonces, han ido determinando la identidad de las y los trabajadores subcontratados, que, sabiéndose precarizados y discriminados, gatilló —por ejemplo— la gran huelga contratista del cobre el año 2007, irrumpiendo con ello una identidad contestataria ante el abuso.

En tanto, Ana Lamas Aguirre, Presidenta de la CTC, junto con poner en valor la profunda reflexión del autor y su publicación “en torno al proceso de construcción identitaria de los trabajadores y trabajadoras subcontratados de la minería”, señaló que se logra identificar los diversos elementos que se ponen en juego en los distintos espacios colectivos, “entre ellos la familia, la clase social, las organizaciones territoriales, el trabajo y las organizaciones sindicales”. Sobre el capítulo que en particular aborda a la CTC, Ana Lamas Aguirre, indicó que “describe y analiza el contexto de surgimiento de nuestra organización, destacando su nacimiento e instalación, la propensión al conflicto y nuestras huelgas más importantes, vinculándolo con el sentido de identidad y de clase que ha caracterizado a nuestra organización desde su fundación.” Además, la Presidenta de la CTC también relevó que Mauricio Muñoz “nos lleva, a través de su relato, a esos momentos de lucha y organización, y las distintas reacciones del Estado y el empresariado, a la solidaridad y sentido de identidad que nuestra huelga fue generando en nuestro pueblo”, donde finalmente “tras 37 largas, intensas y combativas jornadas  de huelga, el 01 de agosto [de 2007] la Confederación de Trabajadores del Cobre  y CODELCO firmamos el acuerdo final [Acuerdo Marco]. Acuerdo que, en la práctica, ha funcionado como negociación ramal y que ha mejorado sustantivamente la vida de las y los trabajadores subcontratados de la Minería”.

Ya al final, la Presidenta de la CTC señaló que “que existe un imperativo para todos los trabajadores y trabajadoras de asegurar mínimos laborales, y ello más allá de su estatus formal en la cadena de subcontratación”, es por ello que —concluyó Ana Lamas— “rechazamos la pretensión actual, de justificar la subcontratación como una fatalidad irremediable. Seguimos luchando por la  creación de mayor valor del trabajo bajo los principios de “a igual trabajo igual salario”, razón por la cual reafirmamos el principio de que “la productividad no se incrementa pagando menos salarios”.